Como abordar el deficit de atencion en el hogar
1 Noviembre 2025
Padres al dia
El Trastorno por Déficit de Atención (TDA) afecta aproximadamente al 5 % de la población mundial y presenta una carga hereditaria superior al 80 %. El diagnóstico y tratamiento oportunos son fundamentales.
¿Cómo se manifiesta el TDA?
El TDA no se presenta de la misma forma en todas las personas. Existen tres formas clínicas:
- Desatención predominante: la persona parece descuidada o irresponsable, pero en realidad tiene dificultades para mantener el foco.
- Hiperactividad predominante: se manifiesta con impulsividad, inquietud motora y dificultad para permanecer en calma.
- Fenotipo mixto: combina síntomas de desatención e hiperactividad.
Impacto escolar del TDA
Los niños con TDA suelen tener dificultades para:
- Mantener la atención y la motivación en clase.
- Completar tareas o exámenes escolares.
- Recordar responsabilidades.
- Participar en actividades grupales.
- Relacionarse con sus compañeros.
Estas dificultades no son intencionales y pueden generar frustración tanto en el niño como en su entorno.
El castigo físico no es una opción
La impulsividad propia del TDA puede llevar al niño a reaccionar de forma inapropiada: pegar, tomar objetos ajenos o responder sin filtro.
Es esencial que padres y docentes cuenten con estrategias de intervención conductual, evitando el castigo físico, que no solo es ineficaz sino perjudicial.
El acompañamiento emocional y la regulación externa son claves para ayudar al niño a desarrollar habilidades de autorregulación.
Tareas domésticas como herramienta terapéutica
Asignar tareas simples en casa puede ayudar al niño a desarrollar funciones ejecutivas:
- Arreglar su habitación.
- Preparar la mochila.
- Llevar una agenda.
Estas actividades promueven la organización, la planificación y la memoria operativa, y pueden reducir los olvidos tanto en el hogar como en la escuela.
¿Qué ocurre si no se trata?
Sin tratamiento, el TDA puede evolucionar negativamente en la adolescencia:
- Mayor riesgo de abuso de sustancias.
- Problemas de autoestima por bajo rendimiento escolar.
- Conductas agresivas como respuesta a la frustración.
El TDA puede coexistir con otros trastornos psiquiátricos. Por eso, es fundamental el acompañamiento de un profesional médico que pueda identificar y abordar posibles patologías asociadas.




